UNA CARTA PÓSTUMA PARA JUAN RAMÓN
Juan Ramón Sáenz, titular de “Aquí se respira el miedo” y de la Mano Peluda más de once años, murió el domingo 29 de mayo del 2011 a las 16:00 horas.
Escribir pues de su partida me toca por dos razones: una, lo consideré un buen amigo personal, y dos, no alcancé a responder un comentario que hizo a este blog hace un mes…
Aquí reproduzco la respuesta que envío a mi inserción del 12 de julio del 2010:
“Hola Claudia, Soy Juan Ramón Sáenz. Te envío saludos y con la sinceridad que siempre nos hemos tenido, te digo que en tu columna hay imprecisiones de fondo, quiero pensar que no lo escribiste con tientes de mala fé, quiero pensar que "así te lo contaron". Me hubiera gustado mucho que me contactaras para contarte y demostrarte la versión real de este asunto. si aún te interesa te dejo nuevamente mi correo evidencias@prodigy.net.mx y mi cel. tú lo tienes, estoy a tus ordenes. ¡Gracias Amiga!”
Juan Ramón, jamás hubiera yo escrito algo para dañarte, ni a ti, ni a Rubén García Castillo, ni mucho menos a Mario Córdoba, pues si de tres compañeros he recibido aprendizaje, apoyo y camino ha sido de ustedes. Es verdad que existía una polémica de derechos autorales de La Mano Peluda –qué pertenece en última instancia a Grupo Fórmula-, pero esta discusión nunca cambió la travesía de los tres en su particular desempeño por la temática angelical, espiritual y narrativa de la radio.
Quiero que sepas, donde estés ahora amigo mío, que te admiré siempre, que el éxito de “Aquí se respira el miedo” y de “La mano Peluda”, al punto de ser una parte muy, muy importante de la Historia de la Radiodifusión Mexicana, se han debido en primera y última instancia a tu capacidad de escuchar a los radioescuchas, a tu dedicación por respetar sus narraciones, a tu sensibilidad por dar cauce a sus inquietudes esotéricas.
De verdad, yo no he querido menospreciar jamás lo realizado por ti. Me duele que no estés más en la vida terrena, pues si algo ha sido grato en mi vida ha sido haberte entrevistado en radio y televisión, es haber testificado lo mucho que te divertías haciendo radio y televisión, por ello, guardaré siempre en mi memoria tu felicidad de la mano de tu esposa Rosario y la de ambos llevando a tu hijito Juan Ramón a las entrevistas de su señor padre, cómo me lo dijiste a la salida de Radio Capital hace como cinco años…
Te he querido bien amigo, y te deseo un viaje a la trascendencia en plenitud. Disfruta mucho cada frase y oración de los miles de radioescuchas y televidentes que te están sintiendo en la partida. Un abrazo fraterno Juan Ramón con todo mi respeto y agradecimiento…
AHORA ME DESPIDO DE TI GIOVANNITA…
Esta amigos lectores, no es una noche tan tranquila para mi, y es que este mismo fin de semana se ha ido a surcar las estelas de la vida no terrena también Giovanna Flores, conocida en la radio y la televisión simplemente como Giovannita, esto en voz de Maxine Woodside, para quien la astróloga realizó más de dos décadas de predicciones.
El cariño personal por Giovannita me viene de la coincidencia con su productor llamado Antonio Vazbar quien no sólo realizó sus programas personales, sino que dio vida a una serie infantil “los cuentos de la tía Giovannita" en Radiorama. Allí sábado a sábado, coincidimos en la contigüidad de emisiones…
Recuerdo mucho, que cada palabra de Giovannita era una nueva lección de vida para mi… y recuerdo su sencillez y su respeto a mis comentarios…
Hoy pienso que Dios ha de necesitar en este momento juntar muchas almas con gran fuerza energética, donde se lleva en un mismo fin de semana a dos de los más poderosos radiófilos en la temática del esoterismo, del consejo astral y de lo angelical.
No quiero “clavarme” en la superchería, o en la veracidad de la radio esotérica, pero si quiero dar fe de cómo locutores, especialistas y narradores del calibre de Juan Ramón y Giovannita han sido, en tanto dieron y darán voz al radioescucha, darán y dieron camino a la radio como primera familia que te escucha, a la radio que te apapacha, te espanta, pero eso si, me consta, no te deja solo…
Vaya pues para todos los radioescuchas de Giovannita y de Juan Ramón sendos abrazos y un deseo sincero de fortaleza. Amigos míos a ambos los seguiremos escuchando en nuestras almas, pues sólo muere de verdad, quien no es recordado más…