Radiodifusores poderes fácticos o poderes opresivos
El 15
de agosto de 2012 hemos sido testigos de una conferencia de prensa que llevó a
cabo Joaquín Vargas Guajardo presidente de MVS Comunicaciones. Esta ha sido una
de las más inusuales situaciones, pues en muy contadas ocasiones, quienes
detentan los derechos de explotación comercial de las vías generales de
comunicación han ocupado sus frecuencias para hablar en primera persona y para
pronunciarse en contra del jefe del ejecutivo mexicano; sin embargo, en este
caso, la ocasión y la situación lo ameritaban.
Joaquín
Vargas fue notificado apenas la primer semana de agosto del 2012 de la decisión
de Dionisio Pérez Jácome, titular de la Secretaría de Comunicaciones y
Transportes en el sentido de que la SCT, es decir, la presidencia de México
encabezada por Felipe Calderón Hinojosa, comenzaría “el proceso de recuperación”
de las frecuencias asignadas a MVS y otros socios para la explotación de la
banda 2.5GHrtz banda ancha idónea en la difusión y emisión de telefonía y
televisión por cable.
Amen de enlazar aquí el documento que MVS ha
expuesto en dos conferencias de prensa el miércoles 15 y el miércoles 22 de
Agosto respectivamente, he de estudiar cuáles son las implicaciones que
conllevan a que un radiodifusor deje su posición como inversionista y detentor
de los insumos materiales de radiodifusión para transmitir telecomunicaciones
para ubicarse inusualmente, como suceso y hecho noticioso.
QUIÉN HA DESPERTADO AL DINOSUARIO
Más
allá de lo que para algunos significa que el Partido Institucional Revolucionario
(PRI) vuelva a la presidencia de México, es decir, un retroceso político, de prebendas
y corrupción política, hay un suceso grave que ha generado las dos
administraciones pasadas del Partido Acción Nacional del año 2000 a la fecha,
esto es, el desajuste de los poderes mediáticos y políticos en México.
Sería iluso no hablar de represión o bien de
opresión de los poderes del Estado a los concesionarios de medios de
comunicación, pues aquí vienen a mente desde las exigencias y manipulación de
Maximino Ávila Camacho en la primera mitad del siglo XX hasta las más resientes
actuaciones en contra de los concesionarios de radio, televisión, telefonía e
internet.
Más
allá de recordar administraciones priístas como las de Miguel de la Madrid Hurtado
que cobró la vida de Manuel Buendía, o la de Carlos Salinas que se llevó
consigo no sólo la vida de cientos de periodistas, sino la abolición de
certificados de aptitud para locutores, certificación de escuelas de radio, y
limitó a nivel discrecional el refrendo de las concesiones de radio y
televisión. Así como sucedió incluso, con Ernesto Zedillo en materia de
opresión a periodistas y a luchadores sociales.
En el
régimen panista no fue menor el juego de intereses de los funcionarios
políticos sobre el concesionario o empresario de medios de comunicación: pero
viene a mente casos como la destrucción de CNI Canal 40, del valor creíble de
Denisse Maerker y Ciro Gómez Leyva y claro, el descrédito a José Gutiérrez Vivó
y ahora la manipulación hacia la familia Vargas, concesionarios de MVS Comunicaciones.
He de
detenerme en Ciro Gómez Leyva y en Desnisse Maerker por una razón, y esta es
demostrar que en el año 2002 luego de la toma de las antenas de CNI Canal 40 en
el cerro del Chiquihuite de parte de TV Azteca, y luego de que se acuñara la
frase inolvidable de Vicente Fox: “y yo ¿por qué?” nació un fenómeno civil que
ha dado cause a un poder también visible y muy digno de análisis aquí: la
popularización y defensa ciudadana de los derechos de concesionarios,
comunicadores y emisoras de radio de corte juvenil.
Lo que
se tomaba como una orden clara y expedita, es decir, “sacar del aire” o
castigar al comunicador que faltara al gusto de presidentes, o instituciones en
los años setentas y ochentas ha devenido en un fenómeno inédito en México: la
batalla y crecimiento de comunicadores y empresas aún por encima de las
autoridades, me refiero, a la defensa de la opinión pública ante la inequidad
de las empresas de comunicación, los periodistas y claro el poder del Estado.
CIRO Y DENISSE ¿COPTADOS O CAPTADOS POR TELEVISA?
Sé que
para muchos, a diez años de distancia, es casi increíble imaginar que así como
hoy se defiende a Carmen Aristegui y a MVS del despojo del derecho de
explotación comercial de la banda 2.5 GHrtz, así el 28 de diciembre de 2002 las
personas, la opinión pública y muchos de los conductores y colaboradores de CNI
salimos a las calles a defender el despojo del que era víctima Javier Moreno Valle,
tal y como sucedió años después, en 2004 en solidaridad con José Gutiérrez Vivó
ante la arteras resolución de inoperancia empresarial entre Grupo Radio Centro
y Grupo Monitor, lo que llevó no sólo a la pérdida del usufructo de las
frecuencias 1560 Khrtz y 1320 Khrtz, sino a la larga, hace cuatro años en el año
2008 a la virtual y absoluta quiebra de grupo Monitor y a la falta de pago a
todos los trabajadores de la empresa y al autoexilio de José Gutiérrez Vivó.
Ciro
Gómez Leyva tuvo en diciembre del 2002 y en enero de 2003 tanta y más aprobación
de la opinión pública en lo que antojaba la mayor traición a un medio de información
crítico, agudo y toral políticamente hablando. Hoy cuando el 18 de agosto de
2012 el movimiento #YoSoy132 tomó simbólicamente las instalaciones de Grupo
Milenio en el Centro histórico por considerar a esta empresa que encabeza el
señor concesionario Francisco González, como la bandera retrógrada contra MVS y
el movimiento Progresista, que apoya a Andrés Manuel López Obrador, pareciera
casi increíble, irrisorio que el que otrora fuera el adalid de la comunicación
incomprendido, Ciro Gómez, ahora sea visto poco menos que como el monstruo
periodístico que apapacha al PRI y a su candidato Enrique Peña Nieto,
minimizando la querella entre Joaquín Vargas y la oficina de presidencia a la
cabeza de Javier Lozano y la vocera presidencial Alejandra Sota.
Hablo
de lo que he vivido de cerca, de cómo Ciro nos decía a todos en las juntas editoriales
de CNI: “quiero que seamos bandera de nota, que nuestras acciones abran las
agendas de políticos, empresarios y poderes públicos…” Y contrario a esta
ilusión periodística hoy veo como Ciro abre pero las agendas de quejosos, incrédulos
y hasta de quienes lo desaprueban tanto por “haberse vendido a Televisa”.
No
menos minado ha sido el camino de José Gutiérrez Vivó y claro de los
trabajadores todos de Monitor, quienes no sólo han tenido que meter la cola
entre las patas para regresar a trabajar a GRC, para ser aceptados en Televisa
Radio y para ser agentes libres y desempleados a cambio de una dignidad perdida
en el tiempo y la injusticia de una querella entre concesionarios, misma que fue
ni más ni menos, una opresión gubernamental panista y que se ha anunciado la
semana del 18 al 24 de agosto de este año 2012, habrá de exigir a los hermanos
Aguirre de GRC que paguen al fin el total del adeudo de 35 millones de dólares a
Monitor… pero ahora ¿ya para qué quieren los trabajadores, Gutiérrez exiliado y
toda la audiencia recuperar esta batalla que también dejó a Gutiérrez en el
camino del adalid mediático y que con el paso del suceso noticioso lo confinó a
ser ahora sólo considerado como el deudor y mentecato de izquierda al que
Felipe Calderón puso en su lugar…
CUANDO
LA OPINIÓN PÚBLICA CREA MONTRUOS MEDIÁTICOS
Siendo
honestos hay que decir que el poder del líder de opinión puede ser la droga narcisista
más codiciada por cualquier comunicador de renombre, pero como me lo hiciera
saber en una entrevista Jacobo Zabludovsky en septiembre de 2005: “no hay más
enemigo para un comunicador que se vuelve voz e imagen del gobierno o su detractor…
que él mismo”. Dice Zabludovsky: -yo tuve que reinventarme para lograr deshacer
al periodista oficialista en que me volví con Televisa de Emilio Azcárraga Milmo,
y luego hube de topar contra mi propio orgullo para aceptar, humildemente, ser
conductor de noticias de radio en GRC y no ya el noticiero del Canal de las
Estrellas en 24 Horas.
Hoy el
hecho inédito de ver a Joaquín Vargas enfrentarse públicamente y ante notario a
las declaraciones de los operadores políticos de Felipe Calderón es algo que se
antoja aterrador, en tanto veremos a Carmen Aristegui en el mismo ojo del
huracán que estuvieron Gutiérrez Vivó y en otro tiempo Ciro Gómez.
Tendrá
pues MVS y la propia Carmen Aristegui que cuidarse de que este sobre poder
mediático que la opinión pública concede a la víctima de la opresión
gubernamental no se le revierta en credibilidad como sucedió con Gómez Leyva y
con Gutiérrez vivó, los dos casos que ya he narrado como antecedentes de este
tipo de choques entre los concesionarios de los medios y las autoridades
gubernamentales.
CONCLUSIONES
HACER POLÍTICAS, SERVICIO A LA SOCIEDAD Y RIQUEZA MONETARIA SA SON TAREAS DEL
CONCESIONARIO
En la
primera Bienal de Radio realizada en México en el año de 1996 en conferencia
plenaria Carlos Aguirre Gómez, vicepresidente de Grupo Radio Centro, hablaba de
los tres niveles de ganancia que un concesionario logra sobre sus programas de
radio o televisión y sobre la explotación comercial de una concesión de
telecomunicaciones, estos son: producción por ganancia política, es decir, la
riqueza generada de tener a tal o cual persona, a tal o cual contenido o a tal
o cual socio comercial a cambio de poder político, el segundo, el poder social,
es decir, el radiodifusor favorece contenidos que pueden no generarle ganancias
económicas, mas si sociales entre los radioescuchas, entre instituciones
civiles o entre la opinión pública.
Y el
tercer poder del concesionario: el poderío económico que es el sentido del
negocio de la radiodifusión, pero que implica atraer conciencias, ideologías, y
creencias mediáticas entre los receptores de los medios.
Al
respecto, ante el virtual despojo de las concesiones de la banda 2.5 GHrtz de
MVS se presume y se deja ver la falta de pronunciamientos de los propios
concesionarios mediáticos, de la Cámara de la Industria de la Radio y la
Televisión; así como de las empresas cableras, e incluso, de parte de los
propios concesionarios de otras empresas de comunicación en solidaridad con
Joaquín Vargas, con MVS y claro, con Carmen Aristegui, lo que se puede leer como
el tiempo de más cautela entre los propios empresarios de telecomunicaciones, o
bien, como uno de los momentos más tensos y hostiles entre el poder político de
los concesionarios y entre el poder económico de las empresas de comunicación masiva
en México.
Es
probable que el cierre de sexenio de Felipe Calderón con este proceso de “rescate”
de la banda 2.5 GHrtz sea también un mal augurio de resquegrajamiento entre los
concesionarios y los operadores políticos del Estado mexicano, pero de que se
está gestando entre la opinión pública, de entre los estudiantes adscritos al
movimiento #Yosoy132 y de entre los radioescuchas de MVS noticias un
empoderamiento de Carmen Aristegui, de esos estamos seguros.
Ahora
queda la cautela, la inteligente revisión de Aristegui y de la empresa MVS Comunicaciones
de verse en el espejo de Ciro Gómez Leyva hoy tan desacreditado y en el espejo
de José Gutiérrez Vivó tan vituperado incluso, por parte de sus otrora fieles
trabajadores, para evitar la victimización de Carmen o de Joaquín Vargas, pues
esto está visto, puede ser luz mediática y escudo de batallas en el ranking de
popularidad, pero también puede dar a resultas de que Carmen Aristegui sea
vista primero como adalid de la democracia y el derecho a la información, y ya
luego, ante los cambios políticos y sociales, sea vista como traidora a la
lucha por la equidad si, por cualquier causa, se le viera alineándose con el
empresario mediático.
Al
final hemos de entender que es tan inédito este juego de dimes y diretes entre
la presidencia y el concesionario MVS Comunicaciones que todos estamos
aprendiendo de la vivencia.
En lo
que toca a Carmen Aristegui habrá que entender que así como ha sido vulnerado Pedro
Ferriz de Con por demostrar su real antipatía al virtual presidente electo, así
podría ella ser usada, como ya sucedió hace dieciocho meses, como carne de
cañón de un pleito por la “banda que todos quieren”, la banda de los 2.5
Gigahertz.
para oreja: laventanaciega@yahoo.com.mx